Los golpes en los dientes de leche son muy frecuentes por caídas accidentales cuando empiezan a caminar, mientras juegan, o por pérdida del equilibrio. Suelen ser golpes contra el borde de una mesa o contra el suelo.
Es importante tener en mente que hay una estrecha relación entre las raíces de los dientes de leche que han recibido el golpe y los dientes definitivos que se están formando debajo.
Por este motivo el modo de actuar y el tratamiento de los golpes en los dientes de leche es muy distinto al de los dientes definitivos.
En general los dientes afectados son los incisivos superiores.
Los incisivos de leche (0-6 años) se cambian alrededor de los 7 años.
Entre los 6 y los 8 años es importante fijarse muy bien si se trata de un incisivo de leche o definitivo, porque las lesiones dentales que pueden ocurrir son muy parecidas en ambas denticiones, pero se tratarán de modo distinto.
¿Qué lesiones pueden producirse?
Pueden producirse hasta 14 tipos de lesiones dentales distintas.
Estas son algunas que los padres pueden identificar y que requieren atención inmediata.
- Rotura del diente (Fractura dental): puede ser casi imperceptible a un trozo grande.
- Desplazamiento del diente (Luxación): el diente puede desplazarse lateralmente, hacia fuera (Extrusión) o hacia dentro (Intrusión).
- Caída del diente por un golpe (Avulsión)
- Heridas en los labios o la lengua
- Fracturas Oseas: En accidentes graves puede afectarse el hueso que sujeta los dientes.
Solo un dentista infantil experto en traumatismos sabrá diagnosticar y tratar el resto de lesiones menos aparentes.
Puedes encontrar información profesional más detallada.
¿Qué hacer?
- Mantén la calma y concéntrate en el bienestar del niño.
- Lava la herida cuidadosamente con agua.
- Observa que daños se han producido
- Si hay heridas en los labios o la lengua haz compresión con una gasa para detener el sangrado.
- Si los dientes se han visto afectados lleva al niño a un dentista infantil.
* Busca los fragmentos en caso de fractura o el diente si este saltó de la boca. NUNCA lo recoloques en la boca si es un diente de leche (niños de 0 a 6 años) - En casos más severos acude a un servicio de urgencias pediátrico.
¿Es necesario ir al dentista infantil de urgencias?
- Si falta un trozo de diente
- Si los dientes han desplazado o se mueven
- Si el niño no muerde igual que antes
- Si un diente ha saltado de la boca
Si no hemos encontrado el diente, el dentista comprobará que el diente no se haya desplazado completamente hacia dentro.
Durante la visita el dentista infantil explorará para ver que ha sucedido y hará pequeñas radiografías intraorales.
Si no aprecias lesiones importantes en los dientes, no es necesario que lleves al niño de urgencias al dentista, pero llévalo en los días siguientes, ya que puede haber lesiones menos apreciables en el primer momento, que pueden necesitar control y/o tratamiento.
Cuidados en casa
- Dieta Blanda durante 10-15 días.
- Una buena higiene favorece la recuperación del diente afectado: Cepilla los dientes que han recibido el golpe después de cada comida con un cepillo suave desde el primer día y aplica Clorhexidina 0,12% 2 veces al día con una gasita mojada en la zona durante 7 días.
- Cepillar el resto de los dientes con normalidad.
- Evita en lo posible el uso del chupete.
Complicaciones
Aunque el niño no se queje de dolor el diente puede infectarse en los días o meses siguientes. Debes vigilar la aparición de:
- inflamación en la encía
- aumento prematuro de la movilidad del diente
- aparición de un granito de pus
- cambios de color en el diente (amarillo, marrón, gris o rosa)En ocasiones los golpes en los dientes de los bebes pasan desapercibidos hasta que los padres detectan un cambio de color.
Si esto sucede es importante que lleves a tu hijo al dentista infantil (odontopediatra), que valorará el tratamiento más adecuado para prevenir defectos de formación en los dientes definitivos que se están formando debajo u otras complicaciones si es posible.
Estos defectos o complicaciones pueden consistir en:
- pequeñas manchas blancas o marrones
- formación incompleta o del esmalte o de la raíz
- cambios de color tempranos
- retrasar o impedir la salida del diente definitivo
- necrosis pulpar (nervio y vasos)
Son más frecuentes después de golpes importantes con desplazamiento hacia dentro (intrusión), diente que salta de la boca (avulsión) o fracturas del hueso que sujeta los dientes.
Otras complicaciones tardías que no siempre pueden prevenirse, pero que a veces deben tratarse:
- malformación del esmalte o de la raíz
- cambios de color
- cierre del espacio donde se encuentra el nervio (calcificación pulpar)
- lesiones óseas alrededor de las raíces secundarias a necrosis pulpar que a veces causan dolor muchos años después.
Controles Periódicos
Los golpes en los dientes de leche deben controlarse hasta que salga el diente permanente con la frecuencia que te indique el dentista infantil.
Tratamiento
Factores a tener en cuenta:
- Riesgo de daños en el diente permanente a causa del golpe o del mismo tratamiento.
- Cooperación del niño.
- Tiempo que falta para el recambio.
- Interferencias para morder.
La prioridad principal es prevenir daños en el diente definitivo que hay debajo.
El tratamiento puede consistir en conservar o extraer el diente si hay riesgo de dañar el diente definitivo.
En fracturas pequeñas se pule o repone la parte que falta.
En fracturas grandes se cura el nervio si es posible.
En desplazamientos leves se puede reposicionar el diente con mucho cuidado o dejar que lo haga por si mismo, depende del caso.
En desplazamientos graves o dientes de leche que han saltado del boca se preferirá la extracción del diente de leche.
Prevención
- Evita el uso del andador.
- Enseña a los niños a:
- Cuidar sus dientes y los de sus compañeros de juegos evitando golpearlos con objetos contundentes
- No dar empujones cuando juegan
- Evitar las riñas o peleas
- No saltar del columpio en movimiento
- Usar la escalera para salir de la piscina